CASTAÑADA 2012


Se cumplió una tradición más: La Fiesta de la Castañada. En esta ocasión se aprovechó   la   visita   trimestral  que   La   Asociación  suele   hacer  a   un municipio  de   Tenerife,  en   este  caso, San  Cristóbal de  La  Laguna, para culminar en El Sauzal con una comida de tinte canario.
El primer punto de encuentro fue la Plaza del Adelantado donde se  organizó la visita guiada por la ciudad a cargo de  un guía oficial  del  Ayuntamiento  y otro “amateur”, pero no menos preparado, como fue nuestro amigo Marcos.
Durante    una    hora   estuvimos     recorriendo   alguna   de   las   casas  de mayor  abolengo  de  la   ciudad, rememorando  su  historia  y  reviviendo las vicisitudes de sus primeros  moradores. Hubo quien aseguró  haber  visto a una dama que se esfumaba a medida que el grupo avanzaba por las distintas estancias de La Casa Lercaro
Terminada  la  visita a  esta  ciudad, Patrimonio  de  la  Humanidad, nos trasladamos al Calvario del Sauzal que no fue precisamente un calvario sino todo  lo  contrario: un momento de  gloria y de la alegría que da el encontrarse esporádicamente con los amigos que, de no ser por estas iniciativas, no tiene lugar. El  almuerzo  fue todo un éxito, copa de bienvenida incluida. El menú, lo dicho, canario en su esencia: higos secos de El Hierro, castañas, mojos, "pescao salao", carne cochino a la brasa y vino del país, quesillo, bizcochón matancero y su café y todo ello sazonado con las más variopintas conversaciones que hacían más llevadero
ese “duro trance del comer y beber”. De aliviar los efectos de los posibles excesos se encargó la parranda de la Asociación, precedida por las siempre esperadas cuartetas de Moisés .
La  parranda,  tímida en  su  comienzo,  logró encender los ánimos de los presentes que por momentos se trasladaron a las verbenas de sus pueblos y se movían con una agilidad digna de la envidia del que esto escribe .
Y la fiesta terminó. Posiblemente de aquel recinto salieron más kilos de los que entraron, pero lo que sí es seguro es que salieron muchos menos años .

¡Hasta otra!